Que estaba pasando un dia como hoy en....



jueves, 8 de diciembre de 2011

Oh Capitán.. mi capitán!

Muchas veces hemos repetido esta frase para recordar la maravillosa película "El club de los poetas muertos" y es que hay frases que tienen tanto poder que son capaces de dar respuesta a  una de las preguntas mas famosas del ser humano ¿como se llama esa película que decía.....? y entonces dices la frase y al momento te acuerdas del titulo.  En ese momento tu mundo vuelve a girar en la misma dirección y ya puedes pensar en otras cosas.
Veamos algunos ejemplos:

 "Mi nombre es Máximo Décimo Meridio, comandante de los ejércitos del Norte, general de las legiones medias, fiel servidor del verdadero emperador, Marco Aurelio, padre de un hijo asesinado, marido de una mujer asesinada y alcanzaré mi venganza, en esta vida o en la próxima" que todos relacionáis enseguida con Gladiator" 

"Que la Fuerza te acompañe" de la saga de La guerra de las galaxias.

"Soy el rey del mundo!".....por supuesto Titanic.

"Siempre recordarán este día como el día en que casi atrapan al Capitán Jack Sparrow"..de Johnny Deep en Piratas del Caribe: la maldición de la Perla Negra

Así podría seguir y seguramente os sonarían casi todas. Pues bien me gustaría hablaros del origen de la frase que lleva por título esta entrada. La frase es el título de un poema de Walt Whitman (poeta estadounidense del s XIX), poema que os dejo a continuación y que espero que lo disfrutéis... también os dejo el fragmento de la película donde se dice esta famosa frase del cine. Dejaros emocionar por ambos.

Oh Capitán, mi capitán!!
Oh Capitán, mi Capitán:
nuestro azaroso viaje ha terminado.
Al fin venció la nave y el premio fue ganado.
Ya el puerto se halla próximo,
ya se oye la campana
y ver se puede el pueblo que entre vítores,
con la mirada sigue la nao soberana.
Mas ¿no ves, corazón, oh corazón,
cómo los hilos rojos van rodando
sobre el puente en el cual mi Capitán
permanece extendido, helado y muerto?
Oh Capitán, mi Capitán:
levántate aguerrido y escucha cual te llaman
tropeles de campanas.
Por ti se izan banderas y los clarines claman.
Son para ti los ramos, las coronas, las cintas.
Por ti la multitud se arremolina,
por ti llora, por ti su alma llamea
y la mirada ansiosa, con verte, se recrea.
Oh Capitán, ¡mi Padre amado!
Voy mi brazo a poner sobre tu cuello.
Es sólo una ilusión que en este puente
te encuentres extendido, helado y muerto.
Mi padre no responde.
Sus labios no se mueven.
Está pálido, pálido. Casi sin pulso, inerte.
No puede ya animarle mi ansioso brazo fuerte.
Anclada está la nave: su ruta ha concluido.
Feliz entra en el puerto de vuelta de su viaje.
La nave ya ha vencido la furia del oleaje.
Oh playas, alegraos; sonad, claras campanas
en tanto que camino con paso triste, incierto,
por el puente do está mi Capitán
para siempre extendido, helado y muerto.




2 comentarios:

  1. Te falta alguna frase, como "Hay una serpiente en mi bota" o "hay un amigo en mí"...

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  2. ¡me suena de algo Mikeeeel! Te inspiro :)

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